Resolución de problemas

eje para la rueda
Conocer el eje ha sido más importante que realizar la rueda

El primer problema que siempre debemos resolver es ¿cuál es el tipo de problema que debemos resolver? Básicamente enfrentamos dos grandes familias de problemas: a) sobre los que no tenemos ni idea cuál es su solución y la tenemos que descubrir; y b) los problemas que tienen solución, pero no sabemos cuál es la mejor y tenemos que realizar un proceso para establecer una escala de la más a la menos conveniente.

En general, tratamos con soluciones que tienen resultados desconocidos en la medida que no reconozcamos la verdadera naturaleza del problema.

Podemos ver diferentes tipos de problemas según lo que sepamos sobre sus causas. Problemas donde la causa es desconocida. A veces, si descubrimos cuál es la causa del problema, podemos encontrar la manera de resolver ese problema. Si eliminamos la causa, desaparece el problema.

A veces, la causa no tiene ninguna importancia, es desconocida o parece «irrelevante». Si hablamos de paz en el Medio Oriente, la causa original del conflicto parece irrelevante para las partes aferradas a la escalada para ver quién es mejor entre ellos, en lugar de aclarar el confuso origen de su conflicto. La partes, antagónicas, saben que lo tienen que resolver cada uno a su manera, pese a que hace décadas perdieron de vista cuál es la causa original de su enfrentamiento. Se crea un bucle donde procurar «la solución» sólo sigue creando más problemas.

Tenemos problemas para los que conocemos varias soluciones posibles, pero no sabemos cuál es la mejor. A veces, éstos son problemas muy difíciles de resolver porque aunque tengamos soluciones con resultados conocidos, también sabemos que hay soluciones con resultados inciertos pero que si se logra lo esperado podríamos alcanzar mayores beneficios.

Si todo esto confunde un poco, solemos aplicar soluciones que parecen ser prioritarias. Circunscribir el incendio de un bosque dentro de un límite posible, es más importante que apagar el fuego de lo que ya se está quemando.

evaluar lo desconocido antes que evaluar lo que sabemos


Por ejemplo: pensemos un poco en buscar un nuevo trabajo. ¿Qué soluciones hay con resultados inciertos? Sabemos que vamos a tener un nuevo trabajo. Tenemos dos opciones: opción A y opción B. Ambos son trabajos geniales. Ambos son grandes oportunidades. Uno implica trasladarse al norte de España. El otro exige radicarse en el Sur de la Argentina. Ciudades de diferentes tamaños; diferentes grupos de personas con las que trabajaremos; diferentes estilos de vida, ecosistemas institucionales y ecologías sociales diferentes, climas diferentes… Intentamos imaginar cómo será nuestrodía a día una vez que aceptemos uno de estos trabajos y nos mudemos allá. ¿Cómo será mi entorno rutinario de trabajo? ¿Cómo me voy a desenvolver en mi nueva comunidad? ¿Cómo será cuando haga nuevos amigos en estos lugares? Tenemos varios cosas que evaluar lo que realmente desconocemos. Lo sabremos cuando lleguemos allí. Y eventualmente descubriremos que somos felices aquí. Que me encanta mi trabajo. Que me encanta la gente con la que trabajo. Que me encanta donde vivo. Todo es genial. Tengo una vida fantástica. Tomé la decisión correcta.

Lograr soluciones con resultados conocidos, sólo es posible cuando lo primero que conocemos es cuál es el problema.

Sabemos que hay «éste» resultado y «otros» resultados. Sólo evaluamos cuál es el mejor. Hay soluciones donde tenemos varios resultados diferentes.

Debemos priorizar aquellos y dejar de lado otras diez cosas diferentes. La lista de prioridades tiene este aspecto: i) esta parece la mejor, ii) luego le sigue esta, iii) luego le sigue ésta otra… y así sucesivamente. Así es como las priorizamos.

Hay varias herramientas para priorizar cuando intentas resolver problemas. Veamos diferentes tipos de problemas y soluciones:

  1. Si tenemos problemas con causas desconocidas, sólo debemos encontrar la causa.
  2. Si tenemos problemas con causas desconocidas e irrelevantes que ni siquiera nos preocupan, sólo reuniremos ideas que puedan ayudarnos a salir del problema. Eso es lo que buscamos.
  3. Decisiones entre soluciones con resultados conocidos. Todo lo que tenemos que hacer es decidir entre una u otra opción.
  4. Decisiones donde hay resultados inciertos. Sólo tenemos que encontrar cuál es la que parece mejor después de evaluar varias cosas sobre la marcha.
  5. Y si tenemos una lista enorme de cosas que priorizar. Hay que determinar un orden entre lo urgente, lo importante y lo secundario. ¿Qué aspecto tiene esto? ¿Cuál es mi mejor opción? ¿Mi segunda mejor opción? ¿Mi tercera mejor opción?

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