¿Es legal publicar un libro así? Respuesta: vivimos en un mundo donde la inmoralidad ya reina por todas partes. ¿No es mejor conocer las reglas del juego, tanto si decidimos no participar como si queremos jugar? Además, ¿quién dice que la moral es siempre blanca o negra? A veces, las zonas grises son las más interesantes.
Las habilidades de los hijos de puta para actuar de manera maliciosa mientras mantienen una apariencia bondadosa, implica cuestiones sociales y psicológicas. Comprender sus comportamientos ambiguos nos permite protegernos y fomentar relaciones interpersonales auténticas y saludables.
No estamos aquí para juzgar ni para dar lecciones de ética. El objetivo es aprender las estrategias para navegar en un mundo alterado, con límites difusos entre muchos estilos de comportamientos. Al final del día, la moralidad es una elección personal, y cada uno debe decidir dónde traza su propia línea.
SOBRE EL AUTOR
El autor es un reconocido especialista en desarrollo organizacional, didáctica del emprendimiento y la innovación.
Actualmente es instructor en Certificaciones Profesionales que imparten la Universidad de Salamanca y doinGlobal para el ecosistema emprendedor de Iberoamérica, Director Técnico del Programa Ejecutivo «Excelencia Operacional» (debriefingteam.com) y del Programa «Especialista Universitario en Andragogía» (miclase.es).
Ha diseñado y dirigido 12 programas de formación y asistencia técnica para emprendedores en 9 Universidades de Iberoamérica. Fundador de Aula Mi Clase Academia, productora de contenidos didácticos y servicios tecnológicos para eLearning.
SOBRE EL LIBRO
Este libro analiza en la amplitud de la ecología social y el ecosistema institucional, la naturaleza del hijo de puta para entender sus estrategias de manipulación y chantaje emocional.
Lo que cada lector haga con este conocimiento es su propia decisión.
Sería un error asumir que hijos de puta son solo los políticos, o los ricos y famosos, o los recaudadores de impuestos o… cualquiera menos nosotros mismos.
La naturaleza humana es ambivalente: fascinante y aterradora. Los humanos somos capaces de hacer, para bien o para mal, más de lo que creemos.
La integridad moral o ser hijo de puta, son opciones de vida.
Así que, la próxima vez que te encuentres al borde de manipular o traicionar a otras personas, pregúntate a ti mismo: «¿Realmente vale la pena?».
Tal vez, en lugar de sucumbir a nuestros instintos más bajos, deberíamos esforzarnos por ser lo mejor de nosotros mismos.