Tómate la moral en serio y al arte en broma… no te cuestiones la moral de los artistas, no te cuestiones el arte de la moralidad, ni lo que puede lograr una cuota inmoral en el arte… no te cuestiones las emociones (ni las empáticas, ni las adversas) cuando ves, escuchas o sientes el arte…
Mientras que piensas en eso… si hay algo que pensar… diviértete un rato con este hallazgo (pura «serendipia») vía http://freiman.info: