En la serie que estoy produciendo para Youtube “Aprender a Enseñar a Emprender de los que Aprenden”, con el propósito de crear un repositorio de testimonios de especialistas para ser utilizado como material didáctico en cursos de formación de formadores y, fundamente, como base para reflexionar acerca del estado del arte de la animación de la cultura emprendedora en el ámbito de las Universidades Iberoamericanas, ya está disponible la entrevista al Prof. Miguel Angel Nuñez, de la Universidad Nacional de Luján (Provincia de Buenos Aires, Argentina).
El video de la entrevista completa (41 min) lo he organizado en 12 unidades temáticas en esta Lista de Reproducción, organizada por cada uno de los temas abordados.
Resumen de los temas claves:
Claves estratégicas para la formación de emprendedores
Sobre a experiencia de base de los formadores Miguel A. Nuñez expone desde su propia perspectiva que, en general, los docentes que se dedican a la formación de emprendedores provienen de la formación académica, la investigación sobre cuestiones del emprendedorismo y la consultoría de empresas.
Uno es el 100% de su muestra estadística
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No considera que la experiencia como empresario, o haber emprendido la creación de una empresa por cuenta propia, se trate de una condición necesaria para poder “enseñar emprendedorismo”. Aunque reconoce útil el contacto con experiencias emprendedoras, en la opinión de Miguel Angel Nuñez, se trata de una perspectiva que va a depender del antecedente y experiencia profesional de cada profesor.
El estado del arte de la formación de emprendedores en las Universidades Argentinas
Aunque hasta el presente se ha hecho mucho todavía, el trabajo de “enseñar a emprender”: es incipiente . Es una disciplina muy nueva y destaca que el profesorado abocado al tema nos hemos “cargado una mochila muy pesada”, porque lo que consideramos como «el plan de vida» de nuestros alumnos excede lo que podemos enseñar en una materia sobre creación de empresas.
Rasgos del formador de emprendedores
En principio poseer una gran sensibilidad con respecto a la variedad (perfiles, experiencias, expectativas, recursos…) de las personas con la que trabajamos. Con humildad, establecer mucho respeto por lo que quiere hacer el emprendedor. Mantener una actitud crítica sobre lo que suponemos que debemos hacer con los estudiantes y realizar revisiones sistemáticas de las metodologías y contenidos que empleamos.
Consejos para el oficio de enseñar a emprender
1) Considerar cuidadosamente la heterogeneidad (variedad) de nuestros estudiantes. Cuestión estrechamente vinculada a la gran diversidad de emprendedores que hay; por lo que, Miguel Angel Nuñez, advierte que no podemos proponer un modelo único de formación que resulte útil para personas diferentes.
2) Llevar al al aula a emprendedores de la vida real como modelos de rol cercanos en proceso de crear su empresa o a poco de tiempo de crearla, para ponerlos en contacto directo con los estudiantes. Considera negativo llevar empresarios con 5 años o más de experiencia porque estos modelos ya están en circunstancias y con problemas diferentes a lo de los estudiantes que a los que intenta motivar sus competencias emprendedoras.
3) Aprender a moderar nuestras expectativas como docentes. Nosotros (el profesorado) no vamos a producir emprendedores como si nuestro trabajo, dictando cátedras sobre cómo crear empresas, fuera a producir embutidos en serie. El desarrollo emprendedor es “un proceso de largo aliento”; por lo tanto, la formación de emprendedores requiere tenacidad y constancia. Trabajamos en una nueva disciplina en la que todavía no conocemos todas las respuestas a todas las preguntas.
5) El fenómeno emprendedor es idiosincrático, cultural y territorialmente sensible; en este sentido, Miguel Angel Nuñez, coincide que hay que evitar “refritos” de contenidos y metodologías que pueden ser resultar útiles en una región y con un perfil de estudiantes que resultarán inútiles en otro lugar y con otra gente.
Crítica a los contenidos y métodos didácticos para la formación de formadores
La intervención educativa para formar emprendedores no es “como el aloe vera” que se supone que también sirve para solucionar todos los problemas económicos y socioculturales relacionados con el desempleo y/o la empleabilidad de las personas.
La experiencia de la crisis argentina al comienzo de la década del 2000, demostró que emprender debe ser una opción de vida y no una obligación. Coincide con que la “formación de emprendedores” es «un negocio» en sí mismo al que mucha gente sin escrúpulos ingresa de manera muy simple, con lo que una gran cantidad de supuestos especialistas están perjudicando tanto la calidad como la eficacia de las intervenciones de la educación superior en la educación emprendedora; por ejemplo: impartir cursos de planes de negocios a personas con necesidades básicas insatisfechas que, en realidad, son buscadores de empleo y no están interesados en emprender la creación de empresas por cuenta propia.
Revisión crítica a las herramientas para el desarrollo emprendedor
Cuestiona, críticamente, la utilidad de Modelo Canvas (en principio utilizado para modelar start up); aunque refiere que podría resultar útil para pensar en modelos de negocios con potencial para tener un rápido crecimiento y siempre en combinación con otras herramientas como el clásico enfoque del “plan de negocios” que también debe ser considerado como herramienta insuficiente frente a la complejidad y los acelerados cambios de contexto. Destaca, como útil, la Metodología de Desarrollo de Clientes (Customer Development Methodology) de Steve Blank.
Hay que considerar que en la realidad “pasa de todo, hay gente fracasa y gente que tiene éxito”. El proceso de emprender tiene un alto contenido tácito; es “como aprender a andar en bicicleta”: se aprende andando en bicicleta.
Las herramientas a las que hicimos referencia ayudan a pensar poco a poco como escalonar el proceso de la idea a la puesta en marcha de una idea, pero “no hay un camino único”.
No podemos transpolar los hábitos y los conceptos del “mundo corporativo” al nivel del nobel emprendedor. Lo que funciona en las empresas consolidadas no siempre está al alcance de quien inicia una actividad empresarial por cuenta propia.
Resultará muy útil alentar el emprendizaje en equipo, evitar emprender de manera solitaria, y aprovechando las herramientas TIC para apalancar el desarrollo de los proyectos, su puesta en marcha y progreso.
Internet como espacio para aprender a emprender
Desde la perspectiva personal, para Miguel, su identidad digital le ha resultado muy útil para desarrollar su red de relaciones profesionales.
Consejos y recomendaciones para los formadores de emprendedores en la educación superior
Lo primero es ser conscientes que estamos trabajando con los planes de vida de los estudiantes. Esto obliga a considerar muy cuidadosamente los resultados que van a generar los procesos motivación que llevemos a cabo en el aula, en el sentido que la intervención de la Universidad debería continuar acompañando a los estudiantes cuando finalizan las fases de instrucción.
Insiste con la cuestión básica de moderar nuestras expectativas: somos proveedores de herramientas para emprender de la mejor manera posible, pero es un proceso complejo que depende de muchos factores del entorno y del propio estudiante.
Fuente: http://youtu.be/f6pI3u23XMI
El charlatan que quiere enseñar a emprender sin haber emprendido nada es como el cura que habla de matrimonio sin nunca haberse casado. Se basa en la teoria y jamas experimenta los problemas que aparecen en el camino por lo que desconoce sus soluciones. Es basico vivir una experiencia para poder traspasarla. No estoy de acuerdo con que no es necesario tener la experiencia de crear una empresa para poder enseñar a crearlas.
Gracias por expresar su punto de vista.