¿Tenemos algún problema con las metodologías de estudio en la educación superior? Si, porque la tendencia es la educación ubicua, sincrónica y colaborativa.
En el momento de escribir estas reflexiones, este es el modelo: HBX de la Universidad de Harvard.
Tal como sus propios mentores y gestores lo presentan, su aula virtual se trata de un “espectáculo” que requiere una sofisticada producción audiovisual, basada en la experiencia y la innovación de proveedores tecnológicos tales como la cadena televisiva NBC, Cisco y BSS.
¿Esto está al alcance de cualquier universidad o empresa en el negocio de la educación? Sí, aunque es necesario inversiones financieras muy elevadas, junto con un potencial de gestión e innovación tecnológica constante.
Además, aunque se disponga de los fondos económicos suficientes y la capacidad técnica adecuada para el montaje de aulas virtuales espectaculares existe otro problema muy importante: la habilidad de los educadores que tienen que conducir el aprendizaje ubicuo, sincrónico y colaborativo.
Reunir algunos cientos de miles de dólares y una docena de excelentes profesionales tecnológicos para la producción audiovisual, resulta mucho más sencillo que desarrollar el talento didáctico apropiado de los educadores que se desempeñen con eficiencia en el «aula del futuro».
Todo esto, personal técnico con educadores colaborando armoniosamente en una plataforma espectacular, no tiene sentido si solo es para suministrar información que los estudiantes deben procesar apoyados con bibliografía y/o recursos audiovisuales al uso.
Es decir, la “espectacularidad” de los nuevos ecosistemas educativos también implica considerar metodologías didácticas que permitan el aprendizaje efectivo.
La enseñanza espectacular es incompatible con el aprendizaje lineal que suele ser: lección, estudio, evaluación, calificación y certificación.
El aprendizaje deberá ser facilitado por educadores con talento para guiar procesos de investigación cooperativa y colaborativa entre grupos de estudiantes que tengan motivaciones individuales para trabajar en equipo en forma ubicua y sincrónica.
No es «fácil»; sí es posible.
Entonces, la sorprendente solución HBX Live! todavía no es un modelo que se puede adoptar con facilidad; aunque caben soluciones muy eficaces al alcance de la gran mayoría de las instituciones educativas. Depende de cuánto dinero se dispone y con qué recursos humanos se cuenta.
Desde el punto de vista tecnológico se pueden considerar soluciones razonablemente eficientes y baratas como las plataformas para la realización de webinars; por ejemplo WebEx, Classonlive, GoToMeeting, Anymeeting o WebminarJam entre decenas de otras buenos servicios incluyendo emisiones en vivo por YouTube o Facebook.
Desde el punto de vista didáctico la clave es reunir profesionales con talento científico, experiencia en la aplicación práctica del conocimiento y con habilidad para desempeñarse en entornos virtuales de aprendizaje.
Mientras que la comunidad educativa discurre marcos teóricos sobre cómo transitar rápidamente desde el modelo analógico de la educación enciclopédica a la dinámica digital de la educación a distancia con un costo razonable; el gran problema en realidad es “¿cómo enseñar para facilitar aprender en ecosistemas ubicuos, sincrónicos y colaborativos?.
Es frustrante e inconducente llevar el mismo enfoque didáctico del aula física al ecosistema digital. La entrega lineal de información, evaluación y acreditación de competencia está dejando de funcionar porque desanima y excluye a la mayoría de los estudiantes.
Mi visión, y más firme recomendación, es el uso de la metodología del estudio de casos combinada con las técnicas didácticas de flipped classroom.
Esto es: que sean los propios estudiantes, en un ecosistema virtual, quienes elaboran sus propios “estudios de casos” en forma colaborativa, sincrónica aún cuando estén en un entorno físico y temporal ubicuo.